Muchas veces hemos denunciado desde aquí en la vulnerabilidad de los marinos que tripulan buques que enarbolan pabellones de conveniencia pues esta práctica da lugar a un vacío legal que deja sin protección a los trabajadores.
También hemos mencionado el hecho de que muchas veces estos buques se ven envueltos en situaciones de pesca ilegal. Cuando son capturados por las autoridades locales, los trabajadores también lo son. En estas circunstancias es común que a la tripulación no se le pague lo trabajado hasta el momento, ni se les asegure la forma de retornar a sus hogares.
Un ejemplo de esto fue el caso del B/P Thunnos (con bandera de Bélice) , que en 1995 fue detenido por encontrarse operando en aguas jurisdiccionales de las islas Georgias del Sur.
Transcribimos la nota aparecida en El Timón al respecto en enero de 1996 y una nota aparecida en el diario La Mañana el 4 de enero de 1996
Carta desde Malvinas (El Timón, enero 1996)
El 23 de diciembre pasado, en el local sindical se recibió un fax remitido desde las Islas Malvinas el cual transcribimos textualmente.
SUNTMA
Compañeros Directivos:
Por la presente les comunicamos nuestra situación.
Cinco uruguayos presos con el B/P Thunnos, en Puerto Stanley, lslas Falkland, por estar operando el buque en aguas jurisdiccionales de las islas Georgias del Sur (el mismo tiene bandera de Bélice y oficinas inexistentes en
Panamá). Fuimos detenidos el l-12-95, llegamos a puerto el 17, el 20 se inició el juicio y el 21 conocimos el veredicto. La sentencia es de casi tres millones de dólares. Hasta el momento no hay noticia de que se vaya a pagar la cifra exigida
(el armador tiene treinta días para hacerlo, en caso contrario pierde el barco). El armador pretende sacarnos de la isla sin pagarnos nada, con la promesa de que llegando al Uruguay se nos pagaría. El supuesto pago sería a través de la
agencia Christophersen, que (siempre según las promesas) nos pagaría la mensualidad, no incluyendo el porcentaje de captura que nos corresponde. Desde que llegamos no recibimos ni un centavo y ya no tenemos víveres. Las comunicaciones que tuvimos con nuestras familias fueron a través de tarjetas magnéticas de cuatro minutos, donadas por la comunidad inglesa. Por favor, no solicitar repatriación, ya que eso nos perjudicaría en nuestro oficio en lo futuro, al no permitirnos salidas al exterior.
La tripulación se compone de 21 chilenos, 5 españoles, 5 uruguayos,2 peruanos y 1 portugués. Los uruguayos son: Walter Fernández (el Chavo), Luis Díaz Fabata, Rúben Navarro, Jorge Carnicelli y Osmar Viena. Comunicar a nuestras familias que nos encontramos bien, que no se preocupen.
Tengan el bien de pasar este caso a la prensa.
La posición de los uruguayos es la de no salir de la isla hasta no cobrar nuestros haberes, que son los siguientes: dos meses de sueldo, porcentaje de pesca (carga completa, que son 140 toneladas y hay solo 83) y jornal de estadía en puerto extranjero. Tenemos el total apoyo de las autoridades de la isla y su población.
El nombre del capitán del Thunnos es Jesús María Aguirrechea, ex patrón de pesca del B/P EMIR (Chami). No tenemos completos los nombres y la dirección de los armadores, solo sabemos que uno es José María y otro es Ñesqui, su teléfono en España en San Sebastián 291014.
Continuamos en lucha por nuestros derechos. Saludos a todos. Felices fiestas.
Hasta alli la transcripción del fax. Los mecanismos de denuncia de la situación comenzaron a operar luego de fin de año y la prensa (incluso la televisiva) se interesó vivamente por el tema.
La salida a la situación debe ser dada por los armadores y por el Estado, el cual debe exigir la retribución debida a nuestros compatriotas y, por intermedio de la Cancillería, velar por su seguridad y por su retorno con garantías.
Más allá de la peripecia puntual del Thunnos, se sigue repitiendo la historia de los barcos piratas, que operan en condiciones de fantasía.
La falta de trabajo obliga a nuestros compañeros a emprender esas travesías de resultado incierto, luego, lo viejo y lo sabido, nadie se hace responsable por lo que pase.
Por último, por una rara ironía, los ingleses defienden de una manera admirable una soberanía que usurpan (las Malvinas).
Ojalá que nuestros supuestos gobiernos soberanos defendieran lo nuestro con tanta severidad frente a los depredadores.(que es sabido que operan impunemente en nuestras aguas jurisdiccicnales).
Sobre esa base, tal vez pudiéramos empezar a hablar del desarrollo del sector pesquero en beneficio de una patria que nos roban a bajo precio
La Odisea del Thunnos. (La Mañana 4 de enero 1996)
«No volvemos hasta tanto se nos pague los salarios»
Pescadores varados en Malvinas se niegan a la repatriación.
Los pescadores uruguayos detenidos en Puesto Stanley, Islas Malvinas, no están dispuestos a regresar a nuestro país a menos que se les abonen los salarios correspondietes a 2 meses de trabajo en el mar.
La situación es desesperante ya que anoche se les terminaban los víveres y el capitán del pesquero de bandera de Belice, requisado por autoridades británicas por pesca en aguas jurisdiccionales, se niega a brindar a los 34 tripulantes los alimentos indispensables.
Los trabajadores uruguayos que se encuentran desde el 14 de diciembre detenidos en el extremos Sur del Atlántico, en las Islas Georgias primero y Malvinas después, puden ser repatriados en cualquier momento pero esta situación, no se producirá sino por la fuerza, según confirmó ayer a La Mañana el dirigente sindical Alfredo Roda, luego de comunicarse telefónicamente con los compatriotas varados en aquellas islas: «No volvemos hasta tanto se nos pague lo que nos deben», dijeron los pescadores en comunicación con sus compañeros del gremio aquí en Montevideo.
Sucede que una repatración a secas supone hacer naufragar 2 meses de labor en el mar, es decir, perder los U$S 500 por mes y U$S 6 por tonelada de pesca prometidos por el capitán del buque «Thunos», al iniciar una travesía trastocada en infierno.
La embarcación partió el 6 de noviembre de Montevideo y el 14 de diceimbre fueron detenidos por autoridades británicas en las islas Georgias del Sur y de ahí trasladados a Puerto Stanley, donde arribaron tres días más tarde.
Se encontraba en ese momento con las bodegas repletas de pescado, unas 140 toneladas.
La empresa armadora de la nave es Atrimar, cuya sede se encuentra en San Sebastián, a la cual las autoridades de Malvinas aplicaron una multa por 3 millones de dólares por pescar en aguas jurisdiccionales, a pagar en 30 días, además de la requisa completa de la carga.
En nuestro país la agencia representante es Christophersen, pero el pago de sueldos corresponde exclusivamente al contratista, el captián del buque.
El capitán del buque había contratado a 21 pescadores chilenos, 5 españoles, 2 peruanos, 1 portugués y los uruguayos Walter Fernández, Luis Díaz, Ruben Navarro, Jorge Carnicelly y Omar Viera.
Sin comida y sin dinero
Decididos a quedarse en las islas hasta tanto se les pague la deuda salarial, los pescadores uruguayos iniciaron una travesía más riesgosa que la recorrida en las aguas durante noviembre y diciembre últimos: mantenerse sólo en base a la solidaridad de la población británica.
El capitán del buque, según afirmó Omar Viera en comunicación con el sindicato, aquí en Montevideo, se niega a brindar comida a la tripulación.
Desde hace varios días, el SUNTMA ha iniciado una serie de contactos a nivel de cancilllería y de representaciones extranjeras en nuestro país, para intentar una solución al problema.
Hubo entonces entrevistas con autoridades del consulado españos en Montevideo, oficina de asuntos laborales, y se decidió dirigir al Ministerio de Trabajo de San Sebastián una copia del contrato de trabajo.
En este encuentro partició el Sr. José D’Elá, Presidente Honorario del PIT-CNT. En estas horas se realizarán gestiones ante la embajada de España en Argentina en otro intento por destrabar la problemática.
Hoy a la hora 9 a su vez, la tripulación del «Thunnos» mantendrá una entrevista con el Gobernador de la Isla, solicitada por él mismo, para comunicar seguramente la posición oficial que se haya adoptada a ese momento.
«Este probelema se repite en todas partes del mundo», dijo Alfredo Roda. «Sucede muchas veces cuando se trabaja a través de una bandera de tercer país y se pesca en forma ilegal. No hay legislación iternacional que ampare a los trabajadores en estos casos. Nosotros respaldamos en todo lo que decidan hacer los trabajadores, los 5 son agremiados al sindicato. Por el momento han decidido quedarse hasta les pague la deuda salarial».